“Tengan la seguridad de que la presencia de Jesús cambia las cosas sin dudar, no solo cambia las cosas, sino que en la medida que ustedes difundan , propaguen , impulsen, el amor a la Eucaristía en esa mediad Jesús ira siendo cada vez más amado, cuando Jesús es amado, cura los corazones de las personas, de las familias y se transforman y eso tiene que incidir por fuerza en una sociedad que necesita de paz, que necesita de amor, que necesita de justicia, que necesita de Dios”. Mons. Faustino Armendáriz Jiménez