(CODIPACSQRO) El tercer Domingo de Cuaresma, celebrado el 28 de febrero, acompañaron al señor obispo Don Faustino Armendáriz Jiménez en la Santa Misa en Catedral y pusieron en el altar las intenciones, los movimientos: Cuarenta días por la vida, y Talleres de Oración y Vida.
Monseñor Faustino inició la homilía recordando a la asamblea que la Cuaresma es un itinerario que ayuda a revisar la vida personal y nos permite llegar a la Pascua con un corazón preparado para recibir a Jesús Resucitado.
Reflexionó sobre la conversión, que es fruto de un encuentro con Dios, con su amor, ternura y misericordia. Es un encuentro clave pues cambia la vida. Comprende al hombre en su totalidad con su persona, su pensar, querer y actuar.
Siempre es tiempo de conversión especialmente la cuaresma cuando Jesús abre los ojos y oídos para orientarnos a la voluntad de Dios.