Santa Iglesia Catedral, Querétaro, Qro., 23 de junio de 2019.
El día 23 de junio de 2019, M.I. Cango Javier Martínez Osornio, presidió la Sagrada Eucaristía en la Santa Iglesia Catedral, en el marco de la Festividad de Santo Tomas Moro, en la cual 7 jovencitas de la Casa de Jesús, recibieron el Sacramento de la Confirmación, mediante la imposicion de manos y la unción con el Santo Crisma. Concelebraron esta Santa Misa Pbro. Rafael Gavidia Arteaga, Pbro. José Luis López Gutiérrez, y M.I. Cango. J. Guadalupe Martínez Osornio, en el momento de la Homilía Mons. Javier les compartió diciendo:
“Hoy más que nunca le pido a Dios que me dé al Espíritu Santo, para decirles una palabra que tenga sentido; primero vamos a tomar varias cosas vamos a celebrar el Sacramento de la Confirmación, segundo es un domingo qué llamamos ordinario no porque sea menos que los demás domingos, sino porque esa es una manera de expresarse de la iglesia y tercero recordamos a Santo Tomás Moro, un hombre consagrado a Dios, qué podría decir yo de él, la virtud más importante de él, fue la fidelidad al Evangelio, la fidelidad a Cristo, la fidelidad a su conciencia, si somos fieles el Señor, nos irá acompañando y aunque no lo seamos su fidelidad es permanente, pero a que tenemos que ser fieles, la fidelidad sobre todo a nuestra propia conciencia, qué importante es, que nuestro corazón este la presencia de Dios, de un Dios que nos ama.
Al principio, hablamos de Santo Tomás Moro, vamos a hablar de cómo hay que acompañar a las personas que tengan grandes necesidades, darles el consuelo necesario, darles lo que necesitan, eso es lo que necesitamos; ustedes que tienen esa capacidad y que tienen esa carrera que sepan apoyar a las personas que tienen grandes necesidades ser consuelo de los demás.
Segundo el Sacramento de la Confirmación, hablamos en una de las lecturas del Bautismo, ahora nos acaban de hacer la presentación de ustedes que se van a confirmarse, se hizo la presentación y el día de nuestro Bautismo el sacerdote nos dijo estas palabras, a nuestros papás y padrinos y a través de ellos a cada uno de nosotros, educa en la fe a sus hijos, esto es lo central; y ¿porque estamos en la iglesia? -porque necesitamos la educación de nuestra fe, qué importante es esto de educar nuestra fe, cuando se nos pregunte ¿qué es nuestra fe?, -es creer en lo que yo no veo, yo recibí la fe desde mi Bautismo y recibo la plenitud de la fe y luego en la Confirmación, voy a recibir la plenitud del Espíritu Santo, yo creo pero no basta con ese primer nivel, hace falta que cada día yo vaya reavivando mi propia fe, que vaya haciendo que se acreciente, creyendo cada vez más en Jesús; por eso el Papa Benedicto XVI nos dice: “La fe es el encuentro con Jesús”, yo ya me encontré con Jesucristo, pero ahora en cada momento de mi vida tengo que tener un reencuentro, para que ponga en práctica mi fidelidad; fidelidad a Dios, fidelidad a mi conciencia, fidelidad a todo aquello que yo necesito tener en la vida.
Tercero, este domingo, le hacen esta pregunta a Jesús ¿Quién dice la gente que eres tú? y entonces se el les pregunta ¿Y ustedes quien dicen que soy yo? unos dicen que Juan el Bautista, otros que Jeremías o alguno de los profetas y nosotros que estamos hoy en esta Eucaristía hoy, qué celebramos a Santo Tomás Moro, hoy qué vamos a recibir el Sacramento de la Confirmación, hoy qué podemos decirle a Jesús ¿Quién es Jesús para mí, para mí como sacerdote?, ¿Quién es Jesús? y eso hay que contestarlo y hay que entender que Jesús tiene que estar en mi vida, para que yo pueda vivir cada vez más profundamente mi propia vida; ojalá que yo siempre, siempre tenga un verdadero encuentro con Jesucristo, si esto lo logró vamos a decir ordinariamente ya gané, si yo me encuentro con Jesús le voy a encontrar a todos estos signos del Cirio Pascual, que es la luz de Cristo que ilumina mi vida, el altar es donde vamos a celebrar la Eucaristía y las y los demás signos son presencia a través de la Eucaristía del mismo Cristo.
La fe de cada uno de ustedes, fe en este gran Santo y a nuestra Santísima Madre Nuestra Señora de los Dolores de Soriano, ojalá que cada uno de nosotros nos encomendemos siempre para que nuestra vida sea realmente valiosa.
Solamente le vamos a dar gracias a Dios por todo ese trabajo que realizan con estas jovencitas, levántenlas ayúdenles, que vivan plenamente su fe, que sean personas que valgan la pena, porque están recibiendo una educación, si eso lo logramos como dije hace un momento ya la libramos. Confía en Dios, confíen en sus papás, en la Virgen y que cada uno de nosotros tengamos este momento de verdadera Fe”.
Al terminar la celebración, Mons. Javier les dio la bendición, y los invito a seguir el ejemplo de santo Tomas Moro.