El Papa a los Palotinos, que el primero de octubre reeligieron al hindú Jacob Nampudakam como nuevo rector general: que la iglesia está entre las franjas más pobres espiritual y materialmente de la población
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10/10/2016
IACOPO SCARAMUZZI
CIUDAD DEL VATICANO
«Ante nuestros ojos fluyen cada día escenas de violencia, rostros sin piedad, corazones endurecidos y desolados…». Papa Francisco recibió esta mañana en el Palacio apostólico vaticano al capítulo general de la Sociedad del Apostolado Católico (Palotinos), que acaba de elegir como nuevo rector general al hindú Jacob Nampudakam. Francisco subrayó la «centralidad de la misericordia» para una Iglesia «llamada a operar con nuevo impulso para volver a despertar y volver a encender la caridad, especialmente entre las franjas más débiles de la población, pobres espiritual y materialmente».
El fundador de la orden religiosa, san Vincenzo Pallotti, «se ha convertido en un faro iluminador e inspirador en la Iglesia», dijo Francisco. «En este Año Santo de la Misericordia, me gusta recordar que Vincenzo Palloti tuvo el don de reconocer que Jesús es el apóstol del Padre, grande en el amor y rico de misericordia, es aquel que siempre cumple su misión revelando a todos el tierno amor y la infinita misericordia del padre. Este misterio de la paternidad de Dios, que abre a cada hombre, mediante la obra del Hijo, su corazón lleno de amor y de compasión, adquiere un particular significado en nuestros tiempos. Ante nuestros ojos fluyen cada día escenas de violencia, rostros sin piedad, corazones endurecidos y desolados. Necesitamos mucho acordarnos de ese Padre, cuyo corazón piensa en todos y quiere la salvación de cada hombre. La misericordia —añadió Francisco citando la bula con la que proclamó el Año Santo, «Misericordiae Vultus»— es “fuerza que todo vence, que llena el corazón de amor y que consuela con el perdón”».
Francisco animó a los Palotinos «a proseguir con alegría y esperanza su camino, comprometiéndose con todo el corazón y con todas las fueras, para que el carisma de su Fundador traiga frutos abundantes también en nuestro tiempo. A él le gustaba decir que la llamada al apostolado no está reservada para algunos, sino que se dirige a todos, “sea cual sea su estado, su condición, su profesión, su fortuna, todos pueden formar parte”. La Unión del Apostolado Católico, que es portadora del carisma de san Vincenzo Pallotti, ofrece muchos espacios y abre nuevos horizontes para participar en la misión de la Iglesia. Por ello —subrayó el Papa—, está llamada a operar con nuevo impulso para volver a despertar la fe y volver a encender la caridad, especialmente entre las franjas más débiles de la población, pobres espiritual y materialmente. En esto, ustedes cuentan con el ejemplo de muchos de sus hermanos, auténticos testimonio del Evangelio y que han dedicado sus vidas al servicio e los demás. Yo también conocí a alguno durante mi servicio pastoral en Argentina, y conservo de ellos un grato recuerdo».
El pasado primero de octubre, la asamblea general volvió a elegir al hindú Jacob Nampudakam como rector general de la Sociedad del Apostolado Católico. En su saludo al Papa, el sacerdote se refirió, entre otras cosas, a los cinco Palotinos asesinados en Argentina durante el periodo de la dictadura. La Sociedad del Apostolado Católico fue fundada por el sacerdote romano Vincenzo Pallotti (1795-1850) en 1835. Actualmente pertenecen a ella 2400 miembros de más de 40 naciones, activos en 56 países del mundo.