(CODIPACSQRO) Los días 14 y 15 de febrero, el Seminario Conciliar de Nuestra Señora de Guadalupe fue sede de la Reunión Provincial de Seminaristas Teólogos, donde en agradable convivencia, compartieron estudio, deporte y eucaristía.
Estudiantes y formadores de los seminarios de la Provincia Eclesiástica del Bajío, conformada por la Arquidiócesis de León y las Diócesis de Celaya, Irapuato y Querétaro, participaron en este encuentro anual con la finalidad de establecer desde ahora lazos fraternos, de manera que en el futuro ministerio, la comunión y el trabajo pastoral se vean fortalecidos y, juntos podamos contribuir desde proyectos comunes, en la tarea de la Nueva Evangelización.
Monseñor Faustino Armendáriz Jiménez, Obispo de Querétaro, celebró con propios y visitantes la santa Misa, el sábado 15 de febrero en la capilla de Teología, saludándoles con cariño dijo: “Siempre es un gusto poder encontrarse con ustedes los seminaristas, pues cada uno representa y significa para la diócesis, una esperanza sólida en que la vida de la Iglesia seguirá respondiendo con audacia en la misión que Cristo, el Buen Pastor, nos ha confiado. Ustedes son en la vida de la Diócesis, los “amigos de Jesús”, llamados a ser auténticos discípulos – misioneros, para colaborar estrechamente con él, con la misma autoridad mesiánica que le viene del Padre y que le ha sido conferida en plenitud con la resurrección. Por esto, considero que desde ahora, cada uno de ustedes no debe olvidar que ha venido a este lugar, con plena libertad, para configurarse con Cristo, hasta llegar a tener los mismos sentimientos, los mismos ideales, la misma suerte. Ustedes deben saber muy bien que la etapa de la teología, por eso es llamada “configuradora”, porque su objetivo consiste en que cada uno de ustedes, se configure con Cristo en la línea de los valores y el carisma de la propia vocación ―Cristo que da la vida en favor del pueblo de Dios― y de la institución concreta, en cada Iglesia Particular, con sus necesidades, su historia y su proceso de maduración comunitaria”.
En su homilía, monseñor Armendáriz citó las palabras del Papa Francisco: “No se pueden llenar los seminarios con cualquier tipo de motivaciones, y menos si éstas se relacionan con inseguridades afectivas, búsquedas de formas de poder, glorias humanas o bienestar económico” (cf. Exhort. Apost. Evangelii Gaudium, 107). Para luego invitar a los jóvenes seminaristas a dejarse formar por el corazón amoroso de María Sanstísima.
Auxiliadora García Bellorín