(CODIPACSQRO) «Nos detenemos para dar este espacio enteramente a Dios, nuestra peregrinación es una peregrinación de fe, el momento culmen de cada jornada es la Eucaristía, luchemos contra todo aquello que nos aleja de Dios, que impide el encuentro con Cristo». Con estas palabras Mons. Armendáriz invita a los peregrinos y peregrinas a caminar.
El señor obispo Don Faustino Armendáriz Jiménez acompañó a las peregrinas y peregrinos al Tepeyac, caminando el trayecto de la comunidad de Peña Blanca a San José Vizarrón, el jueves 11 de julio con las peregrinas y el viernes 12 de julio con los peregrinos. Más que destacar los 125 kilómetros que el Pastor Diocesano ha caminado, es notable el encuentro personal con los ya miles de peregrinos, el saludo, las expresiones de familiaridad y de mucho cariño no han faltado. Como Pastor camina al frente de las ovejas, delante de columna que crece día a día.
Mons. Armendáriz ha insistido en la importancia de la peregrinación para el crecimiento espiritual, para vivir verdaderamente un proceso de conversión y llegar con cada peregrinación a tener los mismos sentimientos de Jesucristo. A peregrinas y peregrinos advirtió de los peligros de convertir la peregrinación en solo un caminar, a desvirtuar su peregrinar con actitudes mundanas o de relajación. Invita a todos a vivir el encuentro con Jesucristo que sale al encuentro, a celebrar la Eucaristía, centro y culmen de cada jornada, a tener la Palabra de Dios presente y constantemente en las manos en el peregrinar al Tepeyac y durante toda la vida.
«Somos peregrinos misioneros —es otra insistencia del Sr. Obispo—, Dios por los sacramentos, nos da todo lo necesario para serlo en plenitud».
La Peregrinación de Querétaro al Tepeyac, llegará a la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe el domingo 21 de julio en tres contingentes: ciclistas, mujeres y hombres, en todos los grupos van numerosos niños y jóvenes.