(CODIPACSQRO) Las Misioneras Marianas celebraron el domingo 16 de febrero, su 94 aniversario de fundación en la Basílica de la Santísima Virgen de los Dolores de Soriano, con la santa Misa que presidió el Sr. Obispo de Querétaro D. Faustino Armendáriz Jiménez, quien al iniciar les dijo: “Nos unimos a esta celebración y a este gozo por el caminar en 94 años que como Misioneras Marianas, encomendadas a la Santísima Virgen María, y haciendo caso de los mandatos de Jesús de vivir la misión en todos los ministerios que realizamos pedimos para que el Señor continúe realizando en cada religiosa esta tarea misionera en donde sea que ustedes se encuentren viviendo su entrega con generosidad, unamos nuestra oración por cada una de las casas que están al servicio de Dios y su Iglesia, pidiendo de manera especial para que este instituto tenga más vocaciones a la vida consagrada”.
Monseñor Faustino dirigiéndose a casi las quinientas religiosas de esta fundación queretana dijo: “Pueden ver con gratitud el pasado y dar gracias a Dios por su estilo de vida, por ser signo de Dios en medio de una comunidad que está harta de palabras y que necesitan testimonios. Les invito a que continúen dando testimonio en este recorrido con la seguridad y certeza total de que esa semilla dé testimonio crece en el silencio de las jornadas de cada día en el silencio de los corazones que miran su testimonio, en el silencio de un ambiente lleno de ruidos, donde se necesita la presencia de hombres y mujeres discípulos de Cristo, que realicen con fidelidad su misión y den frutos”.
“Fidelidad”, vivida de manera extraordinaria en lo ordinario de la vida. “Constancia”, incluso en los momentos de cruz y, “docilidad” que se vive en la respuesta cotidiana, son tres virtudes que el Papa Juan Pablo II destacó de la Santísima Virgen en su primer visita a México, mismo que invitó a las religiosas a tener en su rostro una sonrisa fruto de la alegría. Y el Papa Benedicto complementó “fruto de la presencia del Espíritu Santo en nosotros”. El Papa Francisco también afirmó que no concibe una iglesia sin la presencia de las religiosas y religiosos, que con sus carismas son un tesoro para la evangelización.
El IX Obispo de Querétaro dijo al concluir la homilía: “El Señor recompense toda su entrega, y la Santísima Virgen María, hoy ante la imagen de Nuestra Señora de los Dolores de Soriano proteja su instituto, bendiga a cada una de ustedes, bendiga su fidelidad, constancia y docilidad y las conserve en la alegría que viene de Dios”.
Ante el Dios bueno y misericordioso, la Reverenda Madre Superiora María Ignacia Olvera Félix rezó: “Gracias por 94 años de vida en la Iglesia, perdona las infidelidades y omisiones cometidas y nos acogemos a tu patrocinio y amparo, Señora de los Dolores, ahora que nos acercamos al primer centenario de nuestra fundación, para que impulsadas por la fuerza del Espíritu, hagamos vivo nuestro carisma, siendo en la Iglesia verdaderamente santas, verdaderamente misioneras, verdaderamente marianas, fieles al deseo de nuestros fundadores. Señora, también pongo bajo tu amparo de madre amorosa a todos nuestros niños, jóvenes, maestros, enfermos, ancianos, médicos, enfermeras, catequistas, seminaristas, sacerdotes, obispos y personas a quienes dirigimos nuestros servicios para que les bendigas y procures sus necesidades. Señora de los Dolores, a cada una de las Misioneras Marianas, danos la gracia de permanecer junto a la cruz de Jesús, contemplando su corazón traspasado y desde allí poder lograr el beneficio especialmente para nuestros hermanos más necesitados. Nuestra Señora de los Dolores, ruega por nosotros”.
Jorge A. Rangel Sánchez