Seminario Conciliar de Nuestra Señora de Guadalupe de Querétaro, Col. Hércules, Qro. 14 de Mayo de 2016.
El día 14 de Mayo de 2016 en el Seminario Conciliar de Querétaro, se llevó a cabo el encuentro Diocesano de Ministros Extraordinario de la Comunión, al cual asistieron alrededor 1600 Ministros, procedentes de las 115 parroquias de nuestra Diócesis. Conscientes de su formación permanente, se reflexionó sobre la Misericordia de Dios, manifestada en el cuidado de los enfermos.
La celebración Eucarística fue presidida por el Excmo. Señor Obispo Mons. Faustino Armendíz Jiménez, quien en el momento de la homilía, resaltó la importancia de estar en una formación permanente. Al respecto mencionó: «Solo haciendo vida de comunidad, se puede ser Ministro Extraordinario de la Comunión».
«La comunión debe de ser parte fundamental en la vida de un Ministro, y esta comunión debe tener como lugar de ejercicio primordial, la vida de la parroquia. El servicio de cada uno de ustedes, consiste en ser promotores y propiciadores de la verdadera comunión; Por lo tanto, esta tarea debe verse reflejada en su proyecto personal, parroquial y de familia».
«Han tenido la oportunidad de reflexionar durante este día, un tema muy importante de la pastoral de la salud que es: El cuidado de los enfermos. Por tal razón es que, una de las acciones que ustedes realizan es la de visitar enfermitos, llevándoles la Sagrada Comunión; ante esta tarea es necesario tomar en cuenta lo siguiente»:
- «Deberán hacerlo con una especial delicadeza en el trato, aprendiendo a ver el rostro sufriente de Cristo, en cada uno de ellos».
- «La comunión deberá ser reflejada todos los días, sin empañar el rostro de Cristo».
- «La comunión se deberá notar en la forma de hablar, de tratar a los demás, pero sobre todo en la forma de anunciar a Cristo».
Al finalizar la homilía nuestro pastor Diocesano, recalcó las características que deberá tener el Ministro Extraordinario: Comunión, oración y servicio. Y agradeciendo la participación de cada uno de los asistentes le bendijo, y los invitó a no disminuir en generosidad y seguir respondiendo de una manera fiel a nuestro Señor Jesucristo.