MENSAJE DE S. E. R. MONS. FAUSTINO ARMENDÁRIZ JIMÉNEZ a las “vigilias de obediencia”.
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Estimados Señores Curas,
Estimados Adoradores Nocturnos:
«Es bueno dar gracias al Señor,
y cantar, Dios Altísimo, a tu Nombre;
proclamar tu amor de madrugada,
y tu fidelidad en las vigilias de la noche» (Sal 92, 2).
Con alegría les saludo a todos ustedes en el Señor, deseando que la gracia de poder iniciar este año del Señor 2017, les permita a todos ustedes poder vislumbrar en toda su vida, el horizonte de la esperanza que nos da la certeza de la fe.
Como bien sabemos, la Adoración Nocturna Mexicana tiene como finalidad «hacer guardia y oración durante las horas de la noche a Cristo en la Eucaristía, consolar su corazón ofreciendo los sufrimientos en expiación por sus propios pecados, los pecados nacionales y los del mundo entero, dar testimonio a los fieles de que Jesucristo es el Señor y salvador y que a él, presente bajo las especies sacramentales se le rinde el culto de adoración que ha de tributarse a Dios y promover la Adoración Eucarística» (Estatutos de la Adoración Nocturna Mexicana, Art. 3); esto nos anima y nos llena de profunda esperanza, pues nos damos cuenta que así, en la Iglesia se garantiza el culto de adoración que el Señor merece y además, tantos y tantos corazones, se ven fortalecidos con la oración, especialmente en los momentos de la prueba, las luchas y dificultades de la vida. Somos conscientes que la adoración fuera de la santa Misa prolonga e intensifica lo acontecido en la misma celebración litúrgica. En efecto, «sólo en la adoración puede madurar una acogida profunda y verdadera. Y precisamente en este acto personal de encuentro con el Señor madura luego también la misión social contenida en la Eucaristía y que quiere romper las barreras no sólo entre el Señor y nosotros, sino también y sobre todo las barreras que nos separan a los unos de los otros» (cf. Sacramentum Caritatis, 66).
Nuestra Iglesia Diocesana desde hace muchos años goza de la riqueza de este gran movimiento apostólico, enfilando a niños, jóvenes, hombres y mujeres, quienes como fieles adoradores nocturnos, cumplen con esta noble tarea, haciendo de sí “adoradores en espíritu y en verdad” (cf. Jn 4, 20-24 ). Valoramos todas y cada una de las secciones adoradoras presentes en muchas de las parroquias y templo de la Diócesis. Esta es la riqueza de nuestra fe. Este es el baluarte que contribuye eficazmente para sostener y dar sentido al quehacer misionero y a la tarea evangelizadora.
Les animo para que no desfallezcan en cumplir fielmente con las responsabilidades y obligaciones que adquirieron al asumir el distintivo y al abrazar la bandera. Una de ellas es acudir a las “Vigilias de Obediencia” al Templo Expiatorio Diocesano de Carmelitas, presente en esta ciudad episcopal (cf. Estatutos de la Adoración Nocturna Mexicana, Art. 26). El Consejo Diocesano ha preparado el calendario anual que señala los días en los cuales les toca asistir a cada sección adoradora; ténganlo muy en cuenta en sus programaciones pastorales e intégrenlo a sus agendas parroquiales.
El Señor derramará abundantes bendiciones en ustedes, en su familia, en nuestro país, en nuestra Iglesia y, su vida cristina se verá testimoniada con la gracia de la Eucaristía, pues «el cristiano está llamado a expresar en cada acto de su vida el verdadero culto a Dios. De aquí toma forma la naturaleza intrínsecamente eucarística de la vida cristiana» (cf. Sacramentum Caritatis, 71).
Que a todos el Señor nos permita que nuestra boca proclame su alabanza y anuncie su gloria todos los días de nuestra vida.
Con mi paternal bendición.
Fraternalmente en Cristo y con María.
Ciudad episcopal de Santiago de Querétaro., Qro., a 12 de enero de 2017
+ Faustino Armendáriz Jiménez
Obispo de Querétaro