La comunidad de la Parroquia de Nuestra Señora de San Juan de los Lagos recibió al señor obispo Don Faustino Armendáriz para celebrar la Eucaristía y administrar el Sacramento de la Confirmación a un grupo de niños y jóvenes que se prepararon y fueron presentados ante la comunidad y ante el Pastor Diocesano por el Pbro. Víctor Cuín Herrera.
Al iniciar la celebración el señor obispo dijo: “En esta celebración veneramos a la Santísima Virgen María, Nuestra Señora de San Juan de los Lagos, hoy vincula a esta comunidad en esta celebración y nos unimos en la plegaria pidiendo su intercesión de manera especial por todas nuestras familias, hagamos de este momento un momento de oración de profunda devoción a nuestra Madre del Cielo, sabiendo que ella está siempre dispuesta a escucharnos, nos mira e intercede por nosotros. Pedimos a Dios también por quienes van a ser confirmados, que llenos del Espíritu Santo sean discípulos y misioneros en esta comunidad”.
Guió una reflexión sobre el ofrecimiento de Jesucristo a sus fieles de la Eucaristía destacando dos elementos: Primero: “estar siempre en amistad con Dios”, y segundo: “estar con Dios en su presencia eternamente”. Estos como ideales de toda creatura de Dios. Es necesario hacerle caso al Señor. Recordar que la Eucaristía es un alimento que necesitamos día con día. Recordó también que: “La única manera de reflejar quienes somos y decirles a los demás que somos hijos de Dios es teniendo a Dios en nosotros. Cristo y la Iglesia invitan a dejarle las puertas a Dios. La Eucaristía es el centro de la vida del cristiano”.
Monseñor Faustino invitó a: “vivir la experiencia de cielo, de presencia de Dios, acercándonos a la Eucaristía, sabiendo que es el alimento del peregrino, el alimento del camino”. “María nos ha marcado el camino con su Asunción, el Señor Jesús también nos marca cuál es el camino al cielo, estar con Él y que Él permanezca en nosotros, como permaneció siempre en el seno y en corazón de la Santísima Virgen María”.
Al concluir la Santa Misa el IX obispo de Querétaro invitó a la asamblea:
“El próximo sábado 25 de agosto a las 19:00 hrs. en la Santa Iglesia Catedral consagraremos a la Diócesis de Querétaro y cada una de sus parroquias a los Sagrados Corazones, al Sagrado Corazón de Jesús y al Inmaculado y Doloroso Corazón de María. Por eso he pidió a todas las parroquias que en el día indicado vivan esta consagración y que la preparen para realmente apartarnos para Dios, para la Virgen. Esta Consagración será permanente junto con la Misión Permanente de nuestra Diócesis de tal manera que sean rescatados por Dios los jóvenes, parejas, familias enteras alejadas de los caminos de Dios. ¡Querétaro es de Dios! ¡Nuestra Diócesis pertenece a Dios!
Por eso vamos diciéndoselo a Dios en esta Consagración Diocesana de tal manera que ratificándoselo nos comprometamos a hacerlo día con día y que también los papás consagren a su familia, los dos juntos. Es una tarea de todos, una Consagración que no solamente implica a las parroquias, también a los gobiernos estatales y municipales, a la vida política, a la vida económica de nuestra tierra.
Por eso le diremos a Dios que somos de Él y lucharemos en Querétaro para que el que necesita regresar que regrese a Dios, que regrese a los caminos del Señor. Es el sustento espiritual esta Consagración de toda la Misión que estamos realizando casa por casa y que realizaremos siempre, siempre. No nos fatigaremos de estar yendo a los hogares en nuestras comunidades porque queremos que Cristo esté en el corazón de las familias, en el corazón de cada uno.
Que Dios no estorbe a nuestros planes, que fortalezca nuestros planes de familia, nuestros planes de comunidad”.