Mompaní, Qro. 17 de Septiembre de 2017.
La tarde del domingo 17 de septiembre de 2017, con ocasión de la Fiesta Patronal, en honor a la Santa Cruz, la comunidad de Mompaní, perteneciente al territorio Parroquial de San Rafael Guizar y Valencia, encomendada al cuidado Pastoral del Pbro. Humberto Acevedo Tacuba, recibió a Mons. Faustino Armendáriz Jiménez, Obispo de la Diócesis de Querétaro, quien con la participación del pueblo congregado, celebró la Sagrada Eucaristía y administró el segundo de los Sacramentos a un grupo de 41 niños (as) que preparados con la catequesis correspondiente a su edad, quienes se encontraban dispuestos a renovar su fe. Concelebraron esta Santa Misa, el Pbro. Víctor Rogelio García Sánchez, y Padre Humberto.
Saludó con mucho afecto al Sr. Cura, el Padre Humberto, a toda la feligresía reunida, y felicito también a la Sra. Carmen Núñez, coronada como Reyna de la tercera edad, con 103 años cumplidos. En su Homilía, Mons. Faustino Armendáriz, dijo:
“Los felicito niños, por decir sí a esta fe renovada que hoy van a recibir, por medio de la unción del Santo Crisma y recibir el Espíritu Santo. El día de hoy la liturgia de la palabra nos anima a practicar; “el perdón”, lo cual es un paso decisivo en nuestra vida cristiana para poder estar con Dios en el reino de los cielos. En nuestra sociedad tan lacerada y violentada por falta precisamente del perdón hacia nuestros semejantes, debemos incentivar y practicar esta obra de misericordia tan necesaria en nuestros tiempos, ya que si no perdonamos, los más afectados somos nosotros y las personas que están a nuestro alrededor”.
“Jesus nos pone el ejemplo más perfecto del Perdón, ya que siendo; injuriado, humillado, flagelado, y crucificado, con el ultimo halito de vida, una de las palabras que pronuncio fue: “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”, y junto a la cruz también estaba su Madre, la Virgen María, que obviamente estaba sufriendo por los padecimientos de su hijo, pero acepto la voluntad de Dios y acepto también el cáliz que su hijo Jesus tenía que padecer al dar la vida por nosotros”.
“Queridos niños, padres y padrinos, fomentemos y ejercitemos en nuestra alma y corazón, el hábito misericordioso del perdón, Ustedes a lo largo de la vida, van a ser señalados, van a ser ofendidos, pero a ejemplo de Jesus y nuestra Madre Santísima, pidamos el perdón por todas aquellas ofensas que nos puedan hacer, y meditando la oración del Padre Nuestro, pidamos que Dios nos perdone, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. Acudamos a la intercesión de la Virgen María, para poder ser mejores personas y que nuestra familia siga siendo el núcleo de la sociedad que todos queremos, así sea”.
Al término de la celebración Eucarística, Mons. Faustino impartió la bendición a todos los fieles laicos reunidos, se tomó la foto del recuerdo con todos los niños que hicieron su Confirmación y fue despedido entre aplausos.