DESDE LA CEM: Mensaje a la Diócesis de Ciudad Guzmán

Queridos Hermanos: Sacerdotes, Religiosos, Religiosas, Laicas y Laicos de la Diócesis de Ciudad Guzmán.

El día de hoy se ha dado a conocer que el Santo Padre Francisco me ha designado como Obispo de la Diócesis de Ciudad Guzmán;  nombramiento que debía publicarse en los días inmediatos al Sismo del 7 de Septiembre; pospuesto hasta esta fecha con el fin de no distraer la atención de la emergencia inmediata que ese acontecimiento me exigía.

Esta nueva tarea pastoral que el Papa Francisco, Pastor Universal, me pide en esa Iglesia Particular, para continuar el servicio que tan generosamente ha realizado Monseñor Braulio Rafael León Villegas entre ustedes, sólo pueda verla como una misión que debo realizar en nombre de Cristo.  Ese es mi lema: “En tu Nombre”. No voy por decisión personal, me siento enviado y estoy seguro que ustedes también quieren ver en el Obispo la presencia de Cristo y la acción de Cristo, Buen Pastor.

La misión es Cristo es la  misión de la Iglesia con el Obispo, con todos los Agentes de Pastoral y con toda la comunidad de bautizados. Juntos formamos la familia diocesana. Sólo en la unidad podremos ser reconocidos como discípulos del Señor. Por eso, desde que fui informado de esta nueva encomienda están ustedes en mi oración para que el Señor anime siempre el trabajo de esta Diócesis en la unidad de su amor. Estoy seguro que juntos haremos posible que Cristo se haga presente entre los más alejados y entre quienes experimentan algún sufrimiento moral o material. Unidos tenemos que hacer que el mensaje del Evangelio llegue a todos, con especial preocupación por los más necesitados.

Para toda la comunidad diocesana va mi oración y mi cariño, no sólo porque a esa región me unen lazos familiares, sino porque como bautizados todos somos parte de una sola familia llamada a comprometer su vida cristiana en la construcción de una sociedad más humana, más justa, fraterna y solidaria; una sociedad donde se respete la vida y la dignidad de todas las personas, en donde se valore la importancia de la familia y se ofrezca a las nuevas generaciones un sentido de la vida que vaya más allá de las propuestas inmediatas y egoístas del bienestar consumista. El compromiso de hacer realidad los valores del Evangelio para que se hagan visibles en la vida de la sociedad, es de todos los bautizados.

Va, junto con mi oración, mi afecto para los sacerdotes que cada día realizan con entrega gozosa su servicio pastoral en cada una de las parroquias y en todos los trabajos diocesanos; para las religiosas y religiosos que, desde su carisma, colaboran en las distintas tareas apostólicas buscando hacer actual el Reino de Dios; están muy presentes también las laicas y laicos que, como agentes de pastoral, realizan una misión evangelizadora en comunión con la Iglesia Diocesana, su testimonio mantiene encendida la fe y fortalece la vida comunitaria. Para todas las personas que viven en esa querida Diócesis pido que el Señor les bendiga, les guarde, les conceda su paz y haga brillar su rostro sobre ustedes.

 

25 de Septiembre de 2017

 

    + Mons. Oscar A. Campos Contreras

Obispo Electo de Ciudad Guzmán y

Administrador Diocesano de Tehuantepec