Monterrey N.L., a 29 de septiembre de 2017.
La Dimensión Episcopal Mexicana de Pastoral de Adolescentes y Jóvenes (DEMPAJ) invita a los jóvenes voluntarios a no bajar los brazos de ayuda que extendieron durante el estado de emergencia que se vivió este último mes, pues la situación actual lo amerita.
Lamentamos el asalto ocurrido a jóvenes voluntarios y manifestamos nuestra solidaridad cristiana y oración por ellos y sus familias. Exhortamos a no desanimarse, y a recurrir a la Policial Federal (5846-8760), a Protección Civil, o a la policía de cada estado, para solicitar el resguardo de personas o víveres, que vayan en camino a centros de acopio, o lugares afectados.
A pesar de la situación de violencia que se vive en algunas regiones del país, debemos continuar saliendo al encuentro de quienes experimentan sufrimiento, dolor, tristeza, enojo, desánimo y luto. Seamos instrumento fiel que los ayude a encontrar y contemplar el rostro de Jesús, quien fortalecerá su dignidad y restaurará su corazón.
Han sido principalmente nuestros jóvenes los protagonistas, que sin titubear, han salido a las calles y han demostrado el porqué son la riqueza de nuestro país.
Invitamos a los jóvenes a mantener los centros de acopio abiertos, a no dejar de mandar ayuda a quienes lo necesitan, a ser promotores de la caridad desde nuestras escuelas, iglesias o comunidades, pues debemos, como hasta ahora, mantener el espíritu levantado.
Un espíritu de ayuda que nos va a permitir seguir con la etapa posterior al desastre, la cuál incluye la rehabilitación humana, el fortalecimiento espiritual y psicológico; la reconstrucción material de casas, escuelas, edificios y templos de nuestros pueblos.
Que Nuestra Madre, Santa María de Guadalupe les bendiga y les proteja.
Mons. Juan Armando Pérez Talamantes
Obispo Auxiliar de Monterrey
Responsable de la Dimensión Episcopal Mexicana,
de Pastoral de Adolescentes y Jóvenes.
Mons. Alfonso G. Miranda Guardiola
Obispo Auxiliar de Monterrey y
Secretario General de la CEM