CONFIRMACIONES, TEMPLO SAN JUAN DE LOS LAGOS, Los Álvarez, Pedro Escobedo.

Los Álvarez, Pedro Escobedo, 2 de Febrero de 2018.

Mons. Faustino Armendáriz Jiménez, presidio la Sagrada Eucaristía, en la que 17 niños y niñas, recibieron el Sacramento de la Confirmación, mediante la imposición de manos y la unción con el Santo Crisma, el día 02 de febrero de 2018,  en la el Templo San Juan de los Lagos, de la  Parroquia Santa María Guadalupe, ubicado en la comunidad de Los Alvarez, Pero Escobedo, Qro., perteneciente al  Decanato del San Juan Bautista, el Pbro. Arturo Pérez Navarrete, presento a los niños y niñas dando  testimonio de que se prepararon debidamente y de  acuerdo a su edad para recibir el regalo del Espíritu Santo, quien ilumina nuestra vida. En su homilía el Sr. Obispo les compartió diciendo:

“En este día que celebramos la presentación del Señor,  ustedes traen imágenes del niño Dios, traen a sus hijos,  a sus niños y hoy los bendeciremos con la bendición final en esta Eucaristía,  bendecimos a cada uno de ellos, porque hoy celebramos la fiesta de un niño el día en que José y María van al templo y con ellos Jesús,  Jesús en el templo, sin duda esta es una celebración importante que celebramos 40 días después del nacimiento  de Jesús como pide la ley.

Hoy es la presentación de Jesús y también ya desde hace tiempo se celebra,  la Señora de la Candelaria,  sin duda con esta frase bíblica que aparece el evangelio que habla de la luz cuando el anciano Simeón ve al Señor,  expresa con un cántico “ahora Señor puedes dejar que tú siervo se pueda ir en paz,  porque mis ojos han visto la luz de la salvación”, refiriéndose al niño Jesús, quien lo porta eso mamá la Santísima Virgen María, a quién celebramos hoy el día de la Candelaria,  que porta en sus manos una vela,  una luz y seguramente por eso muchos de ustedes aparte de quiénes van a ser confirmados traen una vela,  porque también es el día de la celebración de la luz y por eso,  hemos bendecido las candelas. Creo que hay que destacar que lo que los medios de comunicación promueven  es la fiesta de los tamales, y  la fiesta de la luz,  la luz que es Cristo el Señor,  que viene a iluminar las tinieblas,  sin embargo aprovechamos primero celebrar a Jesús que es nuestra vida,  que ilumina nuestra vida de tinieblas.  

Hoy contemplamos en el Evangelio,  a Simeón y Ana dos ancianos que van al templo y ahí en esa providencial visita,   Simeón y Ana ordinariamente acudían al templo y encontraron a Jesús,  esto también nos trae una enseñanza práctica, todos podemos encontrar a Dios en donde sea,  pero hay un lugar en qué está de manera privilegiada y ustedes tienen la fortuna de tener el Sagrario,  lo pueden encontrar en el hermano que sufre y ayudarlo,   o encontrarlo en una casa pobre y ahí están tocando a Jesús,  pero de manera privilegiada en dónde está totalmente presente su cuerpo es de los sagrarios de los templos,  donde tiene la dicha ustedes de tener la luz, de tener a Jesús en el Sagrario, por eso hoy creo que vale la pena que nos llevemos el compromiso de acercarnos al Sagrario y seguramente viviremos ese encuentro con Jesús,  cuando uno se postra ante el Sagrario y si no  hagan la prueba visitan a Jesús en el Sagrario y ahí realmente experimentaremos la paz que necesitamos,  Jesús puede suplir todo aquello que nosotros necesitamos en nuestra vida para tener la paz y para tener la sabiduría,  por eso en esos momentos difíciles de tu vida en esos momentos en que no encuentras la salida,  en ese momento de oscuridad de preocupación el Señor te espera,  por eso nuestra relación con Dios debe ser visitarlo siempre,  que sea habitual para nosotros visitarlo siempre que pasemos seguramente se va ir haciendo una costumbre y entrar 5 minutos al Sagrario.

Qué bueno que veneremos las imágenes, pero en el centro del templo lo más importante es el Sagrario donde está Jesús, papás enseñen a sus hijos este hábito, hagan que se haga costumbre visitar al Sagrario la luz para nosotros,  pensemos en ¿quién es nuestra luz? y la mejor forma es,  visitar a Jesús en el Sagrario,  que la Santísima Virgen Nuestra Señora de la Candelaria,  también ella nos guíe fraternalmente a la luz, a su hijo Jesucristo,  pidamos por estos niños que hoy van a recibir con la plegaria del Espíritu Santo,  que ya  todos tenemos,  porque es la luz que nos hace ver con claridad,  que nos hace ser libres cuando estamos en gracia de Dios,  pidamos por ellos y pidamos por sus papás que se preocupan por educar cristianamente y ser los primeros catequistas de sus hijos. Que así sea”.

Al terminar el Sr. Obispo les dio su bendición, y los allí reunidos le brindaron un aplauso como muestra de cariño y agradecimiento por su visita.