Ezequiel Montes, Qro. 29 de octubre de 2021.
La tarde del viernes 29 de octubre de 2021, en el templo parroquial de la Parroquia La Divina Providencia de Ezequiel Montes, Qro. se llevó a cabo la celebración eucarística presidida por Mons. Fidencio López Plaza, obispo de Querétaro, para conferir a 40 niños el sacramento de la confirmación.
La celebración fue concelebrada por el párroco, Pbro. Tomas Manuel Valdés Sotelo, los padres vicarios, Pbro. Carlo Magno Yáñez Torrez y Pbro. Juan Rosales de Jesús y el Pbro. Damián Almaráz Almaráz.
En su homilía Mons. Fidencio agradeció al párroco, a los padres de los niños y a las catequistas por su arduo trabajo: “En primer lugar, saludo y agradezco a su párroco el servicio que está dando a esta parroquia en nombre de Jesucristo el buen pastor y en nombre del obispo… ¡Muchas Gracias padre Manuel! para ti nuestro aplauso. En segundo lugar, quiero agradecer a los papás de los que hoy se confirman… porque si están aquí, es porque de una u otra manera, muy bien o regular sus papás han cumplido con este compromiso el día que los bautizaron. Felicito a los catequistas, para ustedes también nuestro aplauso y reconocimiento.”
En seguida, Mons. Fidencio dio una breve catequesis a los niños sobre el sacramento que estaban a punto de recibir: “¿La confirmación en qué conociste? Consiste en tocar, Dios quiere que todos los que se confirman vayan con la experiencia de que Dios los tocó. ¡Hoy Dios los va a tocar a ustedes! y ¿Cómo lo va a hacer? No va a bajar del cielo un angelito o algo raro a tocarte, Dios te va a tocar primero por medio de tu padrino y luego por medio del obispo, porque Dios quiere que sientas que la mano de tu padrino es la mano de Dios que te toca el día de tu confirmación y luego llega un momento todavía más fuerte cuando pasa el obispo, te pone las manos en la cabeza, te unge y te dice: “Recibe por esta señal el Don del Espíritu Santo” y ¿Cómo responde uno? Amén. Hay niños que están bien distraídos y no responden amén y los que no responden amén, es como si no abrieran la puerta de su casa, llegan a tocarles y aquí no hay nadie. Dios toca su casa, Dios toca su frente… y reciben al Espíritu Santo.”
Después de la homilía se procedió al momento de la confirmación, iniciando con la renovación de las promesas bautismales, hasta el momento de pedir al Espíritu Santo, momento que acompañaron los sacerdotes concelebrantes junto con el obispo al extender las manos hacia los niños y niñas por confirmar. Terminando el momento con la unción con el crisma y la imposición de manos de parte del obispo.
Después de la liturgia eucarística, el Padre Manuel agradeció a Mons. Fidencio su presencia: “La parroquia le agradecemos su presencia, su visita primera pero seguramente van a ser muchas, que Dios le siga fortaleciendo y que Dios le siga llenando de su Espíritu para que comparta toda esa sabiduría con su pueblo, con su diócesis. ¡Gracias por estar con nosotros!”.
Para finalizar, Mons. Fidencio quiso agradecer a los fieles con motivo de los recientes trabajos de renovación en el templo parroquial: “Quiero agradecerle a ustedes porque han embellecido este templo, yo tuve el gusto de verlo casi nacer y he ido viendo cómo se transforma, es muy bello y me dice su párroco que aún faltan vitrales. Es un verdadero lugar donde van a sentirse contentos familia de Dios y bendecidos por Dios, le damos gracias a Dios por todas las manos que hicieron posible este piso tan bello, la pintura, las bancas y otras cosas y hacemos una oración de bendición primero de estas obras que han realizado juntos.”
Mons. Fidencio invitó a los sacerdotes a extender las manos sobre el templo y a que los fieles pusieran sus manos en el corazón para agradecer a Dios estas bendiciones: “Padre Dios, ahora yo en nombre de todos te agradezco humildemente las bendiciones que concedes a esta parroquia bajo el patrocinio de tu Divina Providencia.
Te agradezco humildemente y te suplico que bendigas a su párroco, al padre vicario a todos los agentes de pastoral y bendice también las obras que se han realizado en este templo y que han hecho de él un templo hermoso desde el cual sentimos tu presencia y tu bendición, concede a todos los que van a venir aquí, a sentirse bendecidos, amados y consagrados a tu servicio. Concédeles saber darte gracias, ser obedientes a tu palabra para que por la invocación de tu santo nombre alcancen la salud del cuerpo y la protección del alma. Por Cristo nuestro Señor. Amén.” esparciendo agua bendita Mons. Fidencio dijo: “Que la bendición de Dios esté en este templo y en todos los que vengan aquí”.
Finalizando con la bendición la Santa Misa.