Col. Álamos 2da Secc. Santiago de Querétaro, Qro. 03 de Junio de 2016.
El día 03 de Junio de 2016 Mons. Faustino Armendáriz Jiménez, Obispo de Querétaro, celebró la Sagrada Eucaristía con la participación de un gran número de fieles, en la parroquia de la Inmaculada Concepción, donde adminstró el Sacramento de la Confirmación a 17 jóvenes, alumnos de Preparatoria en la Universidad Marista, y uno más fue partícipe del Sacramento de la Primera Comunión.
En la homilía el Señor Obispo hizo referencia, al grande amor que Dios tiene de manera individual a cada persona, y que lo manifiesta en el Sagrado Corazón de su hijo Jesucristo.
«Cada persona esta llamada a experimentar el amor misericordioso de Dios, pues sólo sabiéndonos amados seremos capaces de vivir la plena libertad que en su hijo Jesucristo hemos recibido. Cuando una persona es capaz de experimentar la certeza del amor, en esa misma medida será capaz de poderlo comunicara los demás».
«El amor de Dios lo vemos representado en la imagen del Sagrado Corazón de Jesús, donde nos muestra un corazón; significando este, la incansable compasión con la cuál Dios se conmueve siempre por la humanidad, y toma la iniciativa de ir al encuentro de sus hijos».
«Pero… ¿Porque nos ama tanto Dios? Solamente encontramos una respuesta: Porque Dios es amor, es infinitamente bueno; y por tal razón aquello que le toca a cada persona es dejarse amar, y corresponder también con amor al amor que Dios nos ofrece».
«Hermanos todos, dejémonos amar por Dios, pues Él nunca nos abandona. Así lo hemos escuchado en la primera Lectura, en la cual el pueblo de Israel al encontrarse exiliado en Babilonia, con la añoranza de su pueblo, la decepción ocasionada por el abandono de aquellos en quienes habían depositado su confianza; aparece Dios por medio del profeta Ezequiel y les dice: Yo nunca los abandono».
«Nosotros somos el pueblo de Dios, y esa palabras empapadas del amor divino, hoy deben calar en lo más profundo de nuestro corazón <Yo nunca los abandono>. Andemos en la vida seguros de la compañía y del amor de Dios». Concluyó.
Al termino de la celebración Mons. Faustino, felicitó a quienes fueron partícipes del segundo de los Sacramentos de iniciación cristiana, y los invitó tener un trato continuo con Jesucristo. Exhortó a los papas y profesores a procurar de manera continua la educación en la fe, pues de esta manera irán madurando esta virtud, y podrán así, corresponder al amor de Dios.