CONFIRMACIONES PARROQUIA DEL SEÑOR DE LA TRANSFIGURACIÓN.

Camino Real de Carretas, # 331, fraccionamiento Milenio III,  Querétaro, Qro.

 23 de junio de 2018.

La comunidad parroquial del Señor de la Transfiguración, ubicada en el fraccionamiento Milenio III,  y perteneciente al Decanato de San Pedro Apóstol, La Cañada, se alegró con un grupo de niños jóvenes, niños, que recibieron de manos del Señor Obispo, Mons.  Faustino Armendáriz Jiménez, el Segundo de los Sacramentos de la Iniciación Cristiana,  después de haber sido debidamente presentados por el Sr. Cura, Pbro. José Luis Salinas Ledesma y haber participado de la catequesis correspondiente a este Sacramento de la Confirmación.

Mons. Faustino, presidió la Santa Misa y el Pbro. José Luis, concelebró, participaron de esta Sagrada Eucaristía  los padrinos,  papás, familiares y amigos de los confirmandos.  En su homilía, el Pastor Diocesano, les dijo:

El Espíritu de Dios está sobre mí, para que yo realice la misión, una misión muy específica;  de llevar la buena nueva a los pobres, a los que más lo necesitan y a realizar esta tarea misionera en medio del mundo y consolar a los abatidos”.  Y Dios, se sigue haciendo presente sobre todo con su amor, como Espíritu Santo.  

Y hoy niños, papás padrinos, hermanos, todos lo vamos a invocar, todos hemos sido bautizados y se nos ha regalado el Espíritu Santo, hemos sido confirmados y ha venido con más plenitud a nosotros;  de tal manera, que tengamos esa luz y esa fuerza de Dios, para realizar nuestra tarea como cristianos. 

Hay que irlo descubriendo cada vez más, de manera paulatina;  Hay que ir profundizando, en ese regalo que Dios nos dio.  Creo que por eso ustedes traen estos niños y jóvenes a confirmar;  papás y padrinos, porque están conscientes de que ellos reciben este Don de Dios, que hace y posibilita que ellos puedan cumplir en el futuro la misión que el Señor les da cuando reciben un determinado Sacramento. Como por ejemplo: los casados, se les dan infinitos auxilios espirituales, para que sean fieles, para que sean fecundos, para que caminen a lo largo de la vida hasta la muerte juntos. 

Quizás Tengamos que descubrir más o por redescubrir, eso que el Señor nos regala.  Hoy les invito a darle gracias a Dios, porque él, se preocupa por nosotros y por qué le da seguimiento a nuestra vida cristiana.

Cuando el niño, el joven, se acerca al Obispo, el Obispo impone las manos sobre él y le hace la señal de la cruz, ungiéndolo con el Santo Crisma;  como un sello que permanecerá siempre, incluso en la eternidad.  Y -le dice- “Recibe por esta señal el Don del Espíritu Santo”.

Y esto, uno tiene que ser agradecido,  porque el Señor nos lo regala para siempre, para la eternidad, como la gracia del Bautismo, como la del Sacerdocio; Y eso nos tiene que llenar a nosotros de seguridad, porque tenemos la certidumbre de que Dios está en nuestro corazón.

Hermanos  ya en tenemos al Espíritu de nuestra vida  invoquemos el Espíritu Santo para nuestra familia , para que fortalezca la unidad y sane las heridas , que tantas puede haber en una familia, que no nos estorbe el Espíritu Santo; más a uno que lo sintamos pleno,  que nos  sintamos a gusto, porque lo tenemos; personal y en familia, esa presencia del Espíritu Santo; que nos ilumine y nos ilumina porque nosotros creemos y nos ilumina y fortalece en la fe, por eso, esa vela que ustedes portan hoy, y que encenderán en la misma llama de Jesús en el Cirio Pascual.

Hoy pues es un día para estar agradecido agradecidos con Dios porque nos da tanto agradecidos con Dios porque se preocupa por nosotros y camina con nosotros pero también pedirle que fortalezca nuestra fe para que no abandonemos ese itinerario de vida que Dios nos ofrece para vivir felices realmente felices en él y con él.

Que la Santísima Virgen María,  nos ayude a recorrer este camino poco largo, o  como el Señor lo quiera de nuestra vida,  para que vivamos,  unidos en el amor, unidos en el amor familiar, unidos en el amor de la comunidad;  María, Nuestra Señora,  ruegue por nosotros”.  

Al término de la celebración el Sr. Cura, agradeció al Sr. Obispo, su visita a esta Parroquia y dijo:

“Les invito a que agradezcamos al Señor Obispo su presencia en medio de nosotros, él, es nuestro Pastor en la Diócesis, y es un gusto que esté en medio de nosotros; Porque hace presente la cabeza de la iglesia, Jesucristo. Todos somos un solo cuerpo, su presencia hace que todos nos sintamos verdadera iglesia de Jesucristo.

 Señor Obispo, Muchas gracias por su presencia,  por el Don del Espíritu Santo, para estos hermanos y hermanas que han recibido el Espíritu  en plenitud, en la Confirmación”

La asamblea estalló en un fuerte aplauso, y el Sr. Obispo les impartió su bendición Episcopal.

Fuente: Equipo Parroquial Comunicaciones San Pedro Apóstol, La Cañada.