Tequisquiapan, Qro. 15 de Agosto de 2016.
En el marco de la solemnidad de la Asunción de la Santísima Virgen María, a los cielos, el Excmo. Sr. Obispo Mons. Faustino Armendáriz Jiménez, impartió le Sacramento de la Confirmación, en tres grupos, a un total de 800 fieles, conformados por niños, niñas, jóvenes y adultos, quienes, después de llevar una adecuada preparación y ser presentados a nuestro Obispo diocesano, por el Sr. Pbro. Salvador Arturo Herrera, Párroco, de Santa María de la Asunción, Tequisquiapan, se dispusieron para recibir la unción del Espíritu Santo, acompañados de sus Padrinos.
Antes de impartir el Sacramento, Mons. Faustino, les exhortó, diciendo:
«Hoy le damos gracias a Dios, por el regalo que recibirán estos niños y jóvenes; el Espíritu Santo, es el máximo regalo que nosotros los creyentes católicos podemos recibir, y como bien les decía, por eso nuestra alegría, por eso la preocupación de los papás, y de quienes les acompañan».
«Padrinos que están aquí, siéntanse privilegiados, porque, esto que ustedes hacen es inspiración de él, y no solamente es de ustedes esta obligación, Dios es el que va a conducir todas sus vidas, por eso, él les protegerá con su Espíritu, en todas las pruebas y tentaciones que se les presenten en el camino de la vida. Agradecemos a Dios, que nos permite, el poder vivir esta experiencia de fe».
«Gracias a Dios, porque nos ayuda en el camino; y que mejor ayuda que la recepción con más plenitud después de nuestro Bautismo, del Espíritu Santo, que es fuerza de Dios, que nos acompaña en el diario vivir».
«El evangelio nos decía, cómo el espíritu de verdad viene a nosotros. Lo que Dios quiere para nosotros, es que caminemos derecho, y estos niños y estos jóvenes lo hagan a lo largo de toda su vida, movidos por el espíritu.
«Cuando el Obispo, se acerca y unge la frente de cada uno de los confirmados y les dice: “Recibe por esta Señal el don de Espíritu Santo”, y lo unge con el signo de la cruz en su frente, es para consagrarlo en la fe».
«Con sus oraciones, ustedes papás y padrinos consagren a sus hijos a Dios, díganle, que están en sus manos, y que haga de ellos los mejores creyentes y ciudadanos, para que sirvan en un futuro a la sociedad y a la iglesia».
«Damos gracias a Dios, porque en este momento, su fuerza y su ayuda, el Espíritu Santo viene a sus corazones, y viene a quedarse en cada uno de ustedes, para que defiendan su Fe, para que hablen de Dios, y vivan como hijos de Dios.
«Oremos mucho, por estos niños, niñas y por estos jóvenes, para que cada día sean mejores por este espíritu Santo que hoy van a recibir. El Señor, bendiga a todas las familias, que hoy celebran la alegría de este Sacramento de la Confirmación».
«Pedimos pues, a Dios, en este hermoso día de la Asunción de la Santísima Virgen María, que su intercesión nos alcance esas gracias que necesitamos. Así Sea.»
Después de recibir el sacramente de la confirmación, en familia se mostró el agradecimiento a Dios, con un momento de oración, para posteriormente tomarse la foto del recuerdo con los papás y padrinos.