«El Señor es mi Pastor, nada me falta, por verdes praderas me hace caminar y hacia aguas tranquilas me conduce». (Sal. 23, 1).
Con profunda pena y dolor hemos recibido este día, la lamentable noticia de que el Padre Juan Marcos Granados Álvarez, Párroco de la Parroquia del Divino Salvador, Doctor Mora, Guanajuato perdió la vida en un accidente automovilístico. Invito a todos los fieles de la Diócesis de Querétaro a encomendar con amor al querido padre Juan Marcos a la misericordia y al amor de Dios, entrañable amigo, sacerdote acogedor y cariñoso, a quien agradecemos su ministerio sacerdotal en su comunidad parroquial.
Nos unimos en continua oración como Iglesia Particular para pedir al Señor que conceda a sus Papás Don Serafín Granados Guillén y a la Señora Ma. Trinidad Álvarez Álvarez, a sus hermanos y a todos sus familiares, la aceptación y resignación cristiana en este momento de inmensa pena y dolor.
A nombre de la Diócesis de Querétaro y de todos los fieles que lo conformamos extendemos nuestras más sinceras condolencias a toda su familia y rogamos para que el Buen Pastor le conceda vivir su sacerdocio en la contemplación de su gloria y le haga partícipe de la Bienaventuranza eterna.
En la sede de Santiago de Querétaro, a los 29 días del mes de noviembre de 2013.
En comunión de oración.
† Faustino Armendáriz Jiménez Obispo de Querétaro