Prot. N° 87/2015 – Circular N° 34/2015
Asunto: Jornada Mundial de las Misiones
A los hermanos presbíteros,
a los miembros de la vida consagrada,
a todos los fieles de la Diócesis de Querétaro.
En el contexto del Año de la Vida Consagrada, la Jornada Mundial de la Misiones adquiere este año particular importancia para los consagrados, que respondiendo al llamado del Señor Jesús, asumen sus mismos gestos de amor y de servicio de perder la vida para encontrarla y dando testimonio del Señor como auténticos discípulos y misioneros. La dimensión misionera de la Iglesia es también intrínseca a la vida consagrada y no debe ser descuidada por los legítimos superiores. (cfr. Exhort. Ap. Evangelii Gaudium, 266).
El mensaje del Santo Padre con ocasión del Domund insiste en recordarnos que en el mandato de Jesús están presentes todos los escenarios y desafíos de la misión evangelizadora de la Iglesia. En ella todos estamos llamados a anunciar el Evangelio a través del testimonio de la vida; y de forma especial, pide a los consagrados, que son llamados a ir a las grandes periferias de la misión, y cooperar con sus carismas al anuncio del Evangelio.
También en el quincuagésimo aniversario del Decreto conciliar Ad gentes se nos invita a releer y meditar este documento, que en su momento suscitó un fuerte impulso misionero en los Institutos de Vida Consagrada, y no olvidar el vínculo íntimo de la vida contemplativa con la misión. Para los consagrados, el anuncio de Cristo, en las diversas periferias del mundo, se convierte en la manera de vivir el seguimiento del Señor.
En especial se dirige a los jóvenes, invitándolos a continuar el sueño de Jesús, con hazaña generosa y a veces contra corriente: no se dejen robar el sueño de una misión auténtica, de un seguimiento de Jesús que implique la donación total de sí mismo. Por los pobres, los pequeños, los enfermos, aquellos que a menudo son despreciados y olvidados, aquellos que no tienen como pagarte (cf. Lc 14,13-14). La evangelización, dirigida preferentemente a ellos, es signo del Reino que Jesús ha venido a traer: «Existe un vínculo inseparable entre nuestra fe y los pobres. Nunca los dejemos solos» (Exhort. ap. Evangelii Gaudium, 48).
La Obra Misionera del Sucesor de Pedro tiene un horizonte apostólico universal. Por lo que necesita de los múltiples carismas de la vida consagrada, para abordar al vasto horizonte de la evangelización y para poder garantizar una adecuada presencia en las fronteras y territorios alcanzados.
A este respecto, deseo hacer un llamado a todos los fieles de esta Diócesis de Querétaro, a colaborar solidariamente en la Jornada Misionera Mundial, el próximo domingo 18 de octubre del 2015 y les recomiendo que:
- Este día se celebre la Jornada Misionera en todas las parroquias de la Diócesis, haciendo la colecta correspondiente en los templos parroquiales, rectorías y capillas. No se realicen colectas para otros fines en el mismo día.
- La recolección de las ofrendas debe ser enviada en su totalidad a la Economía Diocesana que a su vez la pondrá a disposición de las Obras Misionales Pontificias.
Los encomiendo a la intercesión de la Santísima Virgen de los Dolores y ruego les obtenga la gracia de un fructuoso discipulado misionero.
En la Sede Episcopal de Santiago de Querétaro, a los 27 días del mes de septiembre del 2015.
Fraternalmente en Cristo y María.
† Faustino Armendáriz Jiménez
Obispo de Querétaro
Pbro. Dr. Jorge Hernández Nieto
Canciller