Santiago de Querétaro, Qro. 24 de septiembre de 2022.
El pasado 24 de septiembre de 2022, se llevó a cabo «La caminata por la paz», misma que dio inicio en el Seminario Conciliar de Querétaro, para llegar al Estadio la Corregidora, a la cual acudieron al rededor de 12,000 personas de las 119 parroquias, que la Diócesis de Querétaro, así como algunos sacerdotes, religiosas, Mons. Fidencio López Plaza, Obispo de la Diócesis y personas de buena voluntad, que se unieron para pedir el cese de la violencia e implorar la paz en México, en Querétaro y en todas las familias, de una manera pacifica caminaron entonando cantos, alabanzas, gritos y porras, ondeando sus bandera de la paz, sonando sus campanas, llevando un arbolito y vestidos de blanco, por algunas calles de la ciudad para llegar al Estadio la Corregidora.
Llegando al Estadio se tuvo un momento festivo y algunos testimonios así como mensajes de paz, donde participaron un niño, un adolescente, un adulto, un migrantes, una persona perteneciente a un pueblo originario, y el Iman Adnan Haider, de la comunidad musulmana.
Para concluir Mons. Fidencio López Plaza, como Pastor Diocesano dirigió un mensajes a toda la comunidad que conforma la Diócesis de Querétaro, el cual inició diciendo: «Pido por un alto a los feminicidios, los desaparecidos, los homicidios de sacerdotes, de los periodistas y por las víctimas de la inseguridad y la violencia.
Además exhorto a que «Debemos ser artesanos de la cultura de la paz para crear y promover gestos y signos de reconciliación y de paz.
La justicia es la otra ala que nos indica que el camino que hay que practicar para llegar a la paz es el hermano. La justicia es verdaderamente justa cuando hace feliz a los demás, cuando hace felices a los pueblos y dignos a sus habitantes.
“Como sociedad se deben fomentar los valores en familia para mejorar el tejido social, de la mano de la estrategia de las autoridades”.
“La paz debe es trabajo de todos y para ello, es necesario salir de la indiferencia y formar artesanos de la cultura de la paz que promuevan gestos y signos de reconciliación; que se preocupen por los demás y busquen senderos para trabajar en unión”.
Y finalmente invitó a caminar juntos, a unir nuestros corazones, nuestras manos y nuestras voces, a proclamar como María las maravillas que Dios hace.
Invitó a regresar a nuestras casas, a nuestros pueblos como artesanos y mensajeros de la paz.
El festival concluyo con música, entonando el himno a la alegría y Cielito Lindo.
“Con Jesús, la paz está en casa”