Querétaro, Qro. a 22 de mayor de 2022.
El 22 de mayo de 2022, se llevó a cabo el Primer Retiro presencial para la Vida Consagrada, que tuvo como cede la Casa Central de Catequistas de María Santísima, ubicada en la Calle Madero 120, Col. Centro, Qro., con el fin de reflexionar a través de un tema, cuyo ponente fue Fr. Julio Cesar Hernández, OCD, además de poder tener un momento de encuentro, orar, reflexionar y ponerse bajo la acción del Espíritu Santo, que mueve los corazones, anima, consuela y derrama sus dones y terminar con la celebración de la Santa Eucaristía, como hijas amadas por Dios.
Después de dos años en que hemos afrontado la pandemia se hizo este retiro de manera presencial, en el que participaron varias al menos una representatividad de las distintas congregaciones de vida Consagrada presente en nuestra Diócesis de Querétaro,
La Santa Misa la Presidio Fray Julio Cesar Hernández y concelebro Pbro. Lic. Saúl Rigoitia Vega, Vicario Episcopal para la Vida Consagrada de la Diócesis de Querétaro.
En en momento de la Homilía Fray Julio compartió diciendo: “El Siervo del amor ya se ha manifestado a través de sus obras, a través del mesías que se hace siervo”.
Permanecer en el amor que nos impulse, a manifestarlo en acciones concretas en nuestra vida.
Es el Espíritu Santo que o recordara en las palabras las obrar del siervo. Y nos lleva a la experiencia cumbre del amor.
Es la fuerza interior para que así podamos seguir generando paz, y ampliando nuestro amor.
Y pedimos esa gracia a Jesús que no tengamos miedo al amor, a veces pensamos que lo contrario al amor es, el desamor, y no es así el contrario es el miedo, que rompa con nuestros miedos, para que permanezcamos en su amor para siempre, y seguir el itinerario espiritual con El, para que seamos mas capaces de saber escuchar la voz de Dios en nuestra vida; que la proyectemos en nuestras comunidades, en nuestra vida apostólica y mejorar nuestra relación con nuestro prójimo.
Pidámosle a Jesús, esta paz que tanto necesitamos, para seguir llevando a cabo esta obra de El, nosotros solo somos siervos del amor , que queremos llevar a cabo esta gran empresa de Dios.
Al finalizar la Santa Eucaristía, el Padre Saul agradeció al Fray Julio su participación en este retito, así como a todas las superioras y demás asistentes a este encuentro de fraternidad y sinodalidad que se vivió.