«Agradecemos que camine este suelo con nosotros, de este gran momento nos quedará un inolvidable recuerdo, gracias por su alegría que se manifiesta en su permanente sonrisa, gracias por lo bueno que usted nos trae y nos viene a dejar. Le pedimos que ore por esta comunidad y sus necesidades, somos personas con fe en Dios aunque con debilidades humanas, como el temor ente diferentes situaciones. Pedimos su bendición para nosotros y para la comunidad, quisiéramos que se quedará con nosotros, estamos seguro que parte de usted ya es parte nuestra. Que nuestra señora de los Remedios lo acompañe siempre».
Palabras dirigidas a Mons. Fidencio López Plaza por la representante de la comunidad de Álamos.