Domicilio conocido, Comunidad de Cerro Gordo, San Juan del Rio, Qro.
El sábado 20 de octubre de 2018, la Parroquia San Juan Pablo II, de la comunidad de Cerro Gordo, perteneciente al Decanato de San Juan Bautista, en el Municipio de San Juan del Rio, celebro su Fiesta Patronal y el 4° aniversario de su Erección como Parroquia, en este marco fue administrado el Sacramento de la Confirmación a 127 niños y 18 adolescentes y jóvenes, la Sagrada Eucaristía fue presidida por el Excmo. Mons. Monseñor Faustino Armendáriz Jiménez, Obispo de la Diócesis de Querétaro, y concelebro el Párroco del lugar Pbro. Jorge Valencia García. Y durante la Homilía, Mons. Faustino dijo:
“Queridos hermanos bienvenidos, saludos a los papás, y padrinos, que nos acompañan en este día especial para invocar el evangelio, que nos pide no avergonzarnos de quienes somos, somos hijos de Dios, y el hijo de Dios lo expresa con sus acciones, no avergonzándose de lo que es, aquí podemos rezar, hacer la señal de la cruz, pero también no podemos avergonzarnos cuando estamos en casa con los hijos y orar antes de tomar los alimentos, y en un restaurante y en una taquería porque no bendecir los alimentos, o es que nos avergonzamos de Dios , o antes de iniciar las labores cada mañana, estos detalle quizás para algunos insignificante agrada a Dios, y siendo así, porque no hacerlo en familia, con la esposa con los hijos hacer la señal de la cruz, rezar un padre nuestro una ave María una oración cuando se va a tomar una decisión.
Hermanos, no importa que quienes están a nuestro lado sean extraños para nosotros, con estos gestos evangelizamos, y colaboramos en las misiones, en medio de un mundo tan convulsionado lleno de inseguridad y violencia, necesitamos también hacer signos de paz, y todo lo que se refiere a Dios construye la paz y ayuda a la paz, tenemos que usar un lenguaje de paz, con la esposa, con los hijos, con todas aquellas personas que nos rodean, ya basta de ese lenguaje agresivo, violento, debemos usar un lenguaje que exprese quienes somos, y purificar nuestro corazón, purificar nuestros labios, y pedir a Dios su ayuda porque es un luchar contra corriente, si queremos no aparentar una cosa que no somos, sino expresar algo que sí somos, hijos de Dios que tratan de corresponderle y agradar a Dios hasta en esos detalles de la vida.
Concluyó, alentando a los papás y padrinos a seguir el ejemplo de su Santo Patrono San Juan Pablo II, viviendo y dando ejemplo de vida, pues les dijo no están solos tienen al espíritu santo, pidan su fuerza y para que les ayude a ir cambiando poco a poco.
Al termino de la Celebración Eucarística, Mons. Faustino impartió la bendición a toda la comunidad reunida.