DESDE LA CEM: Los desafíos de la migración.

de Guillermo Ortiz Mondragón
Obispo de Cuautitlán

MENSAJE

A TODOS LOS MIEBROS DE LA IGLESIA QUE CAMINA EN MÉXICO

A LAS AUTORIDADES CIVILES DE NUESTRA NACIÓN.

Continúan fluyendo en los medios de comunicación noticias, reflexiones, pronósticos, sin faltar las denuncias ni los reclamos, respecto a la realidad que estamos viviendo respecto al desafío de la Migración.

Como sabemos, México es un país de tránsito, estación temporal y definitiva de hermanos provenientes de otros países y lugar de salida y que acoge a connacionales al ser repatriados. Estamos en el eje de este gran desafío que nos preocupa a todos.

Nuestras autoridades, junto con las de otros países, se han pronunciado al respecto y han buscado y logrado importantes diálogos. Con reconocimiento agradecemos el esfuerzo que realizan. La realidad globalizante que vivimos invita al encuentro más que al conflicto entre los países.

Ya en un comunicado anterior y en nuestro Mensaje con ocasión de la Jornada Mundial de los Migrantes e Itinerantes (22/12/16), habíamos invitado a estar atentos a los momentos que vivimos y actuar, desde la fe y con sentido de Iglesia, con actitud misionera y de servicio.

Ahora me permito sugerir, con todo respeto y deferencia, a todos mis hermanos en el Episcopado, a suscitar un diálogo que pueda darse en los siguientes niveles como un proceso:

  • Diálogo con los propios agentes de Pastoral de Movilidad Humana o, en su ausencia, de Pastoral Social y de Cáritas, para tener datos precisos, actualizados, de esta realidad.
  • Diálogo con las Autoridades Federales cuyas delegaciones existan en el Estado, con las Estatales y Municipales, en los ámbitos de las Secretarías del Trabajo, Desarrollo Social, Salud, Educación, Seguridad Ciudadana, así como las instancias de Migración, de Derechos Humanos y otras que puedan incidir en este tema, buscando una mirada común al respecto.
  • Diálogo con empresarios, con organizaciones civiles, para buscar, junto con los agentes de Pastoral diocesana y de Provincia, caminos para enfrentar este desafío.

El diálogo para salvaguardar el respeto a la dignidad y apoyar a cada persona en su proyecto de vida para el desarrollo particular, de su familia y de nuestra Nación, es elemento de base en nuestra misión evangelizadora.

El Papa Francisco nos invita a buscar en su Mensaje de Cuaresma al “otro” necesitado y en Misericordia et Misera a llevar la misericordia y a la dimensión social promover su cultura. La Dimensión Episcopal de Pastoral de Movilidad Humana está a su disposición para apoyar y animar las decisiones pastorales que los Señores Obispos y sus Agentes de Pastoral decidan.

Que la Sagrada Familia, modelo y protectora de los migrantes nos acompañe.

 

+Guillermo Ortiz Mondragón

Obispo de Cuautitlán

Encargado de la DEPMH