Jalpan de Serra, Qro. 12 de Julio de 2016.
El pasado viernes 08 de Julio, dio inicio la 57 peregrinación femenina de Querétaro al Tepeyac, teniendo como punto de partida la comunidad de Neblinas, en el municipio de Landa de Matamoros.
Al iniciar el peregrinar, el Pbro. Bernardo Reséndiz Vizcaya, Director Espiritual, invitó a las peregrinas a vivir el trayecto a la Basílica de Guadalupe, con una verdadera fe y dándole su lugar a Dios y a la morenita del Tepeyac. Pues solo de esta manera dijo: «tomaremos conciencia de que somos peregrinos en la tierra, en vistas a participar de la Jerusalén celestial, donde nos espera la felicidad eterna. Así como el pueblo de Israel peregrino hacia la tierra prometida, así también cada uno de nosotros formamos parte del nuevo pueblo, que es la Iglesia fundada por nuestro Señor Jesucristo, y que peregrina hacia la patria eterna.
El Padre Berna, quien acompañará y guiará la caravana de peregrinas durante los 17 días que dura el trayecto, fue porta voz de la alegría y la fe, que caracteriza a cada una de las mujeres, que dejando por un tiempo su trabajo, familia y ocupaciones personales han dado inicio a su peregrinar, desde la sierra Queretana. Al respecto mencionó:
«¿Cómo poder explicar el hecho, de que las mujeres sean capaces de ausentarse alrededor de dos semanas de sus ocupaciones ordinarias? La única respuesta que se puede encontrar es: La fe. Pues solamente en clave de esta virtud, la persona vive y soporta las inclemencias del tiempo, el cansancio, el sacrificio corporal, etc. sostenidas con la Esperanza de visitar a la Virgen María, en sus advocación de Guadalupe, en el cerro del Tepeyac».
«El motivo que las ha impulsado a participar de esta peregrinación anual, es variado; algunas peregrinan con la intención de agradecer a la virgencita por un milagro recibido, otras para solicitar algún favor, otras más para pagar una manda, y alguien más por el grande amor que le tiene a la Morenita».
Durante la peregrinación se tiene la oportunidad de orar con el rezo del Santo Rosario, de participar de la Celebración Eucarística, recibir el Sacramento de la Reconciliación y de reflexionar sobre la Misericordia de Dios; pues se realiza la peregrinación en el marco del año de la Misericordia.
Rogamos a Dios por intercesión de la Virgen María de Guadalupe, bendiga a cada una de las peregrinas que se dirigen al cerro del Tepeyac, y suplicamos envíe a su Santo Ángel de la guarda, para que las acompañe, la libre de todo peligro y las lleve sanas y salvas a su destino.
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