1º de Agosto de 2012. Amazcala, El Marqués, Qro. El señor obispo D. Faustino Armendáriz Jiménez visitó la comunidad de Amazcala para celebrar la fe con los hermanos. Le recibió el señor cura Pbro. Rosendo Zavala Herrera y los fieles de la Parroquia de San Alfonso María de Ligorio.
Monseñor Faustino explicó el sentido y significado de este encuentro de fe: “Reunidos en el marco de la fiesta patronal de Amazcala celebramos a san Alfonso María de Ligorio. Siempre la fiesta patronal nos conduce a unirnos como una sola familia, en torno a Cristo, cuya vida la vemos reflejada en los santos, es este caso de san Alfonso, buen pastor que guió su comunidad, la orientó por los caminos que llevan a Cristo. Hoy dejémonos orientar por el Señor que se hace presente en medio de nosotros, pidámosle por nuestra comunidad parroquial, por cada una de nuestras comunidades donde habitamos. Que la oración sea siempre el recurso que utilicemos no solo en los momentos difíciles sino en la vida de todos los días”.
El Sr. Obispo saludó de manera especial a los catequistas que cumpliendo su compromiso bautismal, colaboran con su comunidad para preparar los sacramentos de iniciación cristiana. Los niños, adolescentes y jóvenes presentados ante la asamblea son motivo de alegría para la parroquia así como cuando la comunidad se reúne todos los domingos a celebrar el día del Señor.
Don Faustino evidenció que la vida cristiana es de constante formación, se va descubriendo la fe, la presencia de Cristo en los sacramentos, el encuentro con Jesucristo, en la lectura de la Biblia. Es necesario profundizar en ella para poder dar razón de nuestra fe. Es un camino de esfuerzo y trabajo. Recordó que San Alfonso María de Ligorio en su camino a la santidad se esforzó, tomó la iniciativa, sabiendo de la necesidad de Dios en los hogares y se empeñó porque en las zonas rurales el Evangelio se hiciera vida en las personas que formaban las comunidades que él atendía.
“Hoy Jesús en su Palabra nos invita a cada uno a redescubrir el tesoro de la fe para poder tener a Cristo en nuestra vida, para poder conducirnos según Dios. Y saber qué tesoro tenemos en el corazón”. “La Palabra del Señor es capaz de transformar el corazón del hombre pero requerimos un proceso de formación en nuestras comunidades, y en toda la Diócesis lo estamos haciendo con la ayuda de los sacerdotes y de los agentes de pastoral y de todos los bautizados”.
El señor cura agradeció la presencia del señor obispo que confirma la fe de la comunidad de comunidades, y a los sacerdotes que acompañaron en la celebración, Pbro. Luis Araujo, Pbro. Rodolfo Yañez, Pbro. Tomás Cano y Pbro. Israel Arvizú.