Del folleto de la XXIII Asamblea Diocesana, págs. 33-34)
- Que la Palabra de Dios, hecha Carne, sea el fundamento de todo (Cf. VD 10; PDP 183, 112).
- Que en cada Parroquia se asuma la Eucaristía como centro, corazón y escuela de discípulos misioneros (Cf. PDP 113)
- Que todas las Parroquias actualicen el Consejo Parroquial de Pastoral según los criterios de la Nueva Estructura al servicio de la misión permanente (Cf. PDP 170-173).
- Que cada Parroquia tenga a la manera del PDP, su Plan Parroquial de Pastoral correspondiente a la Misión Continental Permanente (Cf PDP 167, 172).
- Que cada Parroquia esté poniendo en práctica las tres Prioridades Diocesanas: Recomenzar desde Cristo, Refundamentar la Familia y Reencontrar el sentido de la Vida.
- Que en cada Parroquia se haya comenzado a trabajar el proceso de Iniciación Cristiana, que comienza con el Kerigma (Cf. PDP 168-169; 105).
- Que en cada Parroquia se haya comenzado el proceso de Catequesis Permanente «que abarca todo el arco de la vida», por medio de las pequeñas comunidades, grupos o movimientos (Cf. PDP 280, 283).
- Que cada Parroquia procure renovar sus estructuras Pastorales e incluya un Equipo Básico de discípulos misioneros para promover y coordinar la Catequesis Permanente (Cf. PDP 283).
- Que en cada Parroquia se tenga la experiencia de procesos pastorales que den vida y fuerza a los sucesos y viceversa (Cf. PDP 95, 105).
- Que cada Parroquia se convierta en un laboratorio de la nueva cultura cristiana (Cf. DA 509, 480; PDP 185).