La familia es una de las instituciones que más ha sufrido y sufre en el momento actual. A pesar de que oímos decir continuamente que la familia es la célula fundamental de la sociedad, es la que padece más ataques e incomprensiones. Hay por doquier como una conspiración contra la familia, que se origina en el menosprecio del matrimonio, su origen y fundamento. Por eso, es necesario recordar algunos puntos fundamentales que la sostienen.
1. La familia, según el plan de Dios, está formada por papá, mamá y los hijos. La llaman tradicional, pero mejor sería llamarla normal. No hay familia completa sin papá ni mamá, y todo niño tiene derecho a tener un padre y una madre que le brinden cariño y calor.
2. Como la paternidad divina es el origen de la paternidad humana, la misión de los papás es prolongar la presencia de Dios en el hogar, que consiste en dar amor y comunicar la vida. El que honra a sus padres honra también a Dios y merece la bendición del Señor. Los hijos deben corresponder al amor de sus padres con la obediencia y la gratitud.
3. Los hijos son el fruto más precioso del amor de los padres, quienes, al darles la vida, deben comunicarles también la fe, que es vida de Dios. Los hijos aprenden el amor de Dios de sus padres, en el hogar. La familia es escuela de amor, de vida y de fe, que son los tres pilares que sostienen la vida cristiana familiar.
4. La santa Biblia dice que “el principio de la sabiduría es el temor de Dios”; por tanto, una familia sabia se fundamenta en el respeto amoroso a Dios. Sin Dios, no hay familia que resista los embates del mal. La familia que vive conforme a los mandamientos de Dios produce buenos frutos, hombres y mujeres de bien, útiles a la sociedad.
5. Formar una familia unida y estable es una gran tarea que reciben los padres el día que se casan por la Iglesia. Esa es su vocación y misión principal en este mundo. De ello deberán dar cuenta a Dios, y en ello estará su premio y su salvación. No hay tarea más grande que procrear gente de bien. A ello contribuye la Iglesia católica protegiendo y defendiendo la fidelidad conyugal y la unidad familiar. Una familia unida es una bendición para la Iglesia y para la sociedad.
Santiago de Querétaro, Qro., Febrero de 2011.
† Mario de Gasperín Gasperín Obispo de Querétaro