Mons. Fidencio López Plaza X Obispo de la Diócesis de Querétaro, presidió la Eucaristía en el marco del 130 Aniversario de fundación del Asilo San Sebastián, ubicado en Otoño Norte 17, Querétaro, fundado por el padre Felipe M. Sevilla, a finales de 1892 edificó el “Pequeño Hospitalito” para atender a las personas mayores que llegaban enfermas o en situación de abandono, dando origen así a lo que hoy conocemos como Asilo San Sebastián.
En el Momento de la Homilía: Mons. Fidencio Compartió con esta frase: “Vengan a mi, todos los que se sientan agobiados, yo los aliviare”, se puede traducir vengan a mis todos los enfermos yo lo curare, y ¿Cómo nos cura Jesús?, pues también con la enfermedad y los sufrimientos unidos a Jesús curan, a quienes los padece y curan a otros.
El papa Francisco tiene una frase muy bonita que dice: “el sufrimiento unidos a Jesús, sana a los que Dios quiere sanar”, de tal manera que tu sufrimiento Dios, lo puede aplicar a alguien que está en África o a alguien que está a tu lado, el sufrimiento tiene un valor gracias a Dios, por eso los enfermos son una bendición de Dios.
Por eso dice “carguen mi yugo», el yugo que Jesús nos ofrece es el amor, porque sin amor no tiene sentido el sufrimiento, los que aman son capaces de abrir los brazos y dar la vida por los demás, como Jesucristo nuestro señor.
Por eso nos dice “Vengan a mí que soy manso y humilde de corazón», es decir yo soy el ejemplo de esto que les estoy diciendo. Que Dios así nos lo conceda. Concluyó.
Antes de la bendición Mons. Fidencio, Felicito a todos los colaboradores del Asilo, y les invito a que aprenden mucho, en el cuidado de la sabiduría que son los abuelos del asilo. Posteriormente invitó a los sacerdotes que concelebraron a dar juntos la bendición.
Finalmente el Padre Alejandro, también agradeció la presencia de Mons. Fidencio y a todos los colaboradores y asistentes, por hacer posible los 130 años del Asilo, e invito a pasar a la convivencia que con mucho cariño se preparó para esta ocasión tan especial.