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Un dΓ­a despuΓ©s de la Fiesta de la ExaltaciΓ³n de la Cruz, la Iglesia conmemora a Nuestra SeΓ±ora de los Dolores.
En la DiΓ³cesis de QuerΓ©taro es conocida como la β€œfiesta chica”, donde veneramos a la π‘©π’†π’‚π’•π’ŠΜπ’”π’Šπ’Žπ’‚ π‘½π’Šπ’“π’ˆπ’†π’ π‘΄π’‚π’“π’ŠΜπ’‚ 𝒅𝒆 𝒍𝒐𝒔 𝑫𝒐𝒍𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒅𝒆 π‘Ίπ’π’“π’Šπ’‚π’π’, 𝑷𝒂𝒕𝒓𝒐𝒏𝒂 π‘ͺπ’†π’π’†π’”π’•π’Šπ’‚π’ π‘·π’“π’Šπ’π’„π’Šπ’‘π’‚π’ 𝒅𝒆 𝒏𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒂 π’‚π’Žπ’‚π’…π’‚ π‘«π’Šπ’Μπ’„π’†π’”π’Šπ’”.
Esta advocaciΓ³n mariana viene desde muy antiguo, desde los orΓ­genes de la Iglesia catΓ³lica, cada vez que los cristianos recordaban los dolores de JesΓΊs, que estuvieron asociados a los de su Madre. A inicios del siglo XIX, en 1814, fue instituida como Fiesta por el Papa PΓ­o VII, quien dispuso que se celebre cada 15 de septiembre.
Esta hermosa devociΓ³n ha sido alentada por muchos santos, con el patrocinio directo de la SantΓ­sima Madre de Dios.
Es asΓ­ que, la Virgen MarΓ­a se le presentΓ³ a Santa BrΓ­gida de Suecia (1303-1373) y le comunicΓ³ lo siguiente: β€œMiro a todos los que viven en el mundo para ver si hay quien se compadezca de MΓ­ y medite mi dolor, mas hallo poquΓ­simos que piensen en mi tribulaciΓ³n y padecimientos…Por eso tΓΊ, hija mΓ­a, no te olvides de MΓ­ que soy olvidada y menospreciada por muchos. Mira mi dolor e imΓ­tame en lo que pudieres. Considera mis angustias y mis lΓ‘grimas y duΓ©lete de que sean tan pocos los amigos de Dios”.
La Madre de Dios prometiΓ³, a travΓ©s de la Santa, que concederΓ­a siete gracias a aquellas almas que la honren y acompaΓ±en diariamente, rezando siete Ave MarΓ­as mientras meditan en sus lΓ‘grimas y dolores.
Por su parte, San Alfonso MarΓ­a de Ligorio (1696-1787) cuenta que Jesucristo revelΓ³ a Santa Isabel de HungrΓ­a que Γ‰l concederΓ­a cuatro gracias a los devotos de los dolores de su SantΓ­sima Madre.
ACIPrensa
Nuestra SeΓ±ora de los Dolores, ruega por nosotros.